Pedaleando por la Quebrada de las Conchas

De Cafayate a Salta por la Ruta 68, descansando en el hostal Loki

Salimos de Cafayate rumbo a Salta, de nuevo, pero por la ruta 68 en vez de la Cuesta del Obispo. Antes de dejar Cafayate aprovechamos para conocerla un poco y sacar unas fotos. Finalmente acabamos por comer allí, bastante temprano, a eso de las 11,30. Además de empanadas de queso y carne, probamos por primera vez la humita, una comida bien andina a base de maíz.

Lo que se dice pedalear, empezamos sobre las 12 con la intención de llegar a La Viña, donde pensábamos hacer noche en un camping. Eran unos 100 km, en gran parte de bajada, de modo que nada parecía que no pudiéramos llegar hasta allí. Además de ser en descenso, el camino resultó ser un lugar muy bonito que atraviesa la Quebradas de Cafayate, también conocida como Reserva Natural Quebrada de las Conchas. El paisaje son formaciones rocosas de espectaculares formas y colores fruto de la erosión eólica e híndrica, así como la ampliud térmica a la que están expuestas. Realmente un paisaje impresionante de tonalidades rojizas que nos obligaba a hacer fotos continuamente.

El Obelisco

La YeseraComo no hay nada perfecto, a partir de las 15 h comenzó a soplar un viento muy intenso que nos pegaba de frente y nos obligaba a pedalear incluso en los tramos de descenso. El frío también empezaba a asomar. A pesar de abrigarnos, pedalear se estaba convirtiendo en una tarea casi imposible fruto del viento. El sol se puso tras las montañas y las temperaturas también cayeron en picado. Visto lo visto, optamos por hacer dedo. De nuevo los astros a nuestro favor hicieron que en poco tiempo parara una furgoneta. Facundo y Laura junto a sus dos hijos, venían de Cafayate e iban para Salta así que nos llevaron hasta las puertas de Salta, al hostal Loki. Allí ya habíamos contactado con su gerente, Belén, que usa couchsurfing para promocionar el hostal. Dos días pasamos en el Loki, descansando y durmiendo cómodamente en una cama, jugamos a ping-pong e hicimos una sesión de cine con palomitas.

Hicimos dedo con Facundo, Laura y sus hijos
Hostel Loki
28 mayo, 2017