Guarapuava – Serra da Esperança
Rescatados por Antonio
Todo el altiplano de Curitiba a Foz de Iguazu es un sube y baja continuo. Según parece nosotros vamos progresivamente descendiendo, aunque la verdad no lo notamos. La mayor parte del tiempo estamos entre los 700 y mil metros de altura. Ahora bien, cuando la cota baja mucho, el altiplano recupera la altura con ascensiones más o menos largas, como la que afrontamos ese día, la Serra da Esperanza. Es una subida de 7,5 km pero con una pendiente suave y muy buen asfalto. El único problema es que muchas veces no tiene arcén nuestro sentido de la marcha y hemos de cambiar al otro. El desnivel del día superó los 1.200 metros. Un día duro.
Al llegar a Guarapuava, nuestro destino, bajaron dos hombres de una furgoneta en mitad de la avenida principal. Nos preguntaron si necesitábamos algo, pero nos dio por desconfiar y dijimos que no. Teniamos varias opciones para dormir en Guarapuava, pero todas salieron mal. Íbamos a ir a dormir al albergue municipal pero no fuimos muy bien recibidos y nos acordamos que Andrey tenía algunos amigos en Guarapuava. Le pedimos si nos podía ayudar y nos pasó el contacto de Antonio Vieira, que no era sino uno de los dos hombres que nos habían ofrecido ayuda al llegar a Guarapuava.
Pese a nuestra desconfianza nos vino a buscar con su furgoneta y quedamos dos días en su casa con su familia. Nos cedió la habitación de sus hijas y al día siguiente nos reencontramos con Andrey pues los acompañamos a escalar.
Luego fuimos hasta la cachoeira que tiene el salto más grande del sur de Brrasil, la cachoeira de San Francisco, con 198 metros de caída. Si queréis saber más sobre las cascadas brutales y muy poco turísticas de esta región clickar aquí. A la noche rematamos el día con un buen rissoto.